“Las casi cuatro décadas de democracia representativa en las que vive España han configurado un escenario político donde el poder ha tenido un grado de concentración muy significativo. El desarrollo de las Comunidades Autónomas supuso la puesta en marcha de poderes descentralizados, con mayor o menor capacidad, llegando a constituir en algunos casos un verdadero freno al poder central que tuvo que pactar diferentes políticas en numerosas ocasiones.”

Artículo Dividir el poder